Barbara Cardenas is a Student Ambassador from Perù, studying Chemical and Biochemical Engineering at the University of Bologna
Published on 23 June 2025 | South America
Italia siempre fue mi sueño, y la Universidad de Bolonia, con su curso especifico de ingeniería química y bioquímica me encantó desde el principio. Así que ni siquiera tuve el tiempo de darme cuenta y ya estaba pensando en mi vida en Italia. Una de mis preocupaciones antes de partir era el hecho de vivir sola, nunca había estado por mi cuenta y mucho menos tan lejos de mi familia, casi todos viven en Perú.
Al llegar a Italia me costó bastante manejar todo sola, encontrar tiempo para hacer todos los quehaceres de la casa y a parte estudiar e ir a la universidad. Además, al principio se complicó aún más porque no vivía en Bolonia, vivía en Reggio Emilia porque tuve dificultad en encontrar un cuarto, entonces también perdía mucho tiempo en el trayecto de ida y de regreso de la universidad y no podía socializar mucho tampoco por este motivo. Por otro lado, extrañaba mucho a mi familia, especialmente a mis hermanas.
Poco a poco empecé a sentirme mejor, principalmente gracias a mi familia que vive acá1 a los que voy a visitar constantemente. Aunque no había hablado mucho con ellos previamente de mi mudanza a Italia, somos muy cercanos, y he llegado a quererlos como quiero a mi familia en Perú. Ellos han sido mi pilar y me ayudaron bastante en adaptarme al país. Otro apoyo fundamental fueron mis amigos, que conocí después de mudarme a Bolonia. Esto hizo que las cosas sean más fáciles para mí en este país. Obviamente aún tengo días donde me siento un poco decaída, pero por suerte, tengo personas en mi vida en que contar.
Al llegar, no solo tuve que acostumbrarme a vivir sin mi familia, sino también a una cultura diferente. Por ejemplo, lo que me quedó más impreso, fue que los locales cierran temprano, especialmente los restaurantes: abren desde las 12:00 hasta las 15:00 y de ahí cierran y vuelven a abrir a las 19:00. En mi país, la mayoría de los restaurantes abre a las 11:00 y todos se mantienen abierto hasta las 23:00. Algunos restaurantes inclusive están abiertos las 24 horas del día.
Non obstante el choque cultural, que es bastante normal al principio, recomendaría si o si estudiar en Bolonia. Me encanta la ciudad, me encanta el paisaje, la arquitectura y especialmente las personas. Siento que es la mejor ciudad en Italia para estudiantes, donde se puede conocer a personas de diferentes países y no solo de Italia. Bolonia es, también, de las ciudades donde mejor se come en toda Italia, y que se pueden encontrar restaurantes de todo tipo. Por último, pero no por importancia, la Universidad de Bolonia es una universidad que ofrece muchas actividades para los estudiantes, en comparación con otras de Italia, que a la larga es bastante importante, porque a muchas personas le cuesta integrarse, como me sucedió a mí al inicio. Siento que nunca voy a terminar de conocer Bolonia porque siempre descubro nuevas cosas, es una ciudad grande y maravillosa.
Me acuerdo perfectamente el momento en que me enamoré de la ciudad de Bolonia. Siempre me ha gustado la ciudad, pero en marzo me sentí por primera vez parte de esta. No fue solo por un evento en particular, pero fue un momento donde me di cuenta de que estaba feliz, un momento donde me di cuenta de que tenía personas que me importan y que a las cuales también les importo. Fue cuando fui al mirador de Villa Ghigi, el cual es un lugar bellísimo lleno de vegetación. No recuerdo haberme sentido tan relajada como en ese día, caminando, escuchando música, y acompañada de personas que aprecio mucho. Ni bien me senté en una de las bancas vi toda la ciudad y me sentí completa, nunca había visto tan linda ni tan tranquila a Bolonia, y lo mejor de todo es que sentí finalmente que pertenecía a esta ciudad, que hasta ese entonces nunca había percibido. Fue ahí donde Bolonia se convirtió en mi segundo hogar.